Claves para convivir mejor con tus vecinos
¿Al mudarte a tu apartamento en renta en santo domingo te preocupa que la relación con los demás propietarios sea buena? Citymax-Pt.com te trae unas claves para convivir mejor con tus vecinos. Sigue estas pautas y crea relaciones armoniosas con los que te rodean en tu edificio.
¿Por qué es importante tener una buena convivencia vecinal?
Los humanos son seres sociables, nacieron para vivir en comunidad. Eso hace que sea muy importante tener buenas relaciones con las personas que ven a diario, como los vecinos y compañeros de trabajo o clases.
La convivencia vecinal es un factor esencial en la estabilidad de comunidades residenciales. La armonía en las comunicaciones, el respeto mutuo y apoyo que se pueden brindar los vecinos es fundamental en los edificios. Además, es básico para garantizar el bienestar físico y mental de cada uno de los habitantes.
Es importante tener un trato cordial con los demás integrantes del vecindario. La humildad, el respeto, solidaridad son valores fundamentales de la convivencia en comunidad. Todos deben ser siempre amigables, pero sin inmiscuirse en los asuntos privados de cada hogar.
Además de la ubicación, tamaño y condiciones de la vivienda. Lo que debes buscar en tu primera casa es una comunidad organizada. Ya que, muchas veces los vecinos se terminan convirtiendo en una segunda familia. Para los niños es primordial que haya otros de su misma edad con quienes jugar. Mientras que los adultos buscarán hacer amistades, conociendo personas con intereses similares. Si encuentran vecinos que comparten sus mismos gustos, profesión o actividades de ocio, suelen reunirse para dialogar sobre sus temas de interés.
Igualmente es importante relacionarse con los dueños de las casas o apartamentos contiguos, porque son ellos quienes te avisarán si hay una irregularidad en la tuya cuando estés fuera.
Claves para convivir mejor con tus vecinos
Las normas de convivencia en una comunidad de vecinos son acordadas por la organización vecinal o el condominio.
Si compraste o rentaste un inmueble en Santo Domingo asegúrate de que en ese vecindario tengan un estatuto de convivencia y conócelo. En este generalmente se expresa la regulación de lo que se puede y no hacer en ciertas horas, días, y cuál es el proceso para la solicitud de algunos permisos, etc.
Toma en cuenta que hay comportamientos sociales que hacen que las relaciones humanas sean más fluidas. Quizás no todo esté expresado en ese documento de normas. Sin embargo, tu como cabeza de familia deberás ser el principal ejemplo para los tuyos, para que cumplan con estas normas de convivencia y sigan la moral y las buenas costumbres.
Cortesía básica en tu comunidad
Sé ejemplo para tus hijos y adopta estas normas básicas de convivencia:
- Recoge los desechos de tu mascota cuando la saques a pasear a las áreas verdes del edificio.
- Evita los ruidos molestos. Ten en cuenta que no a todos les agrada escuchar música con alto volumen. Mientras que a otros la algarabía de las reuniones les resulta molesta. Así como el sonido de reparaciones. Por lo tanto, lo mejor será avisar a tus vecinos sobre las actividades que harás en casa, si habrá ruido. Regula el volumen de la radio, la televisión y otros aparatos. Procura no importunar a tus vecinos y, limita la duración de la fiesta, cumple con el horario de la comunidad.
- Las áreas comunes son de todos los que hacen vida en ese lugar. Así que respétalas y mantenlas limpias. En especial aquellos perímetros que corresponden a tu propiedad.
- Por ninguna razón uses el espacio que le corresponde a tu vecino, como el estacionamiento o salida de este.
- Si estás recién llegado a ese lugar, acércate a los residentes y preséntate a tus vecinos.
- Participa en las actividades organizadas por la junta de propietarios para que aproveches de involucrarte en tu nueva comunidad.
- En los edificios se paga una cuota mensual de mantenimiento. Esto incluye los gastos de servicios comunes, tales como la vigilancia, aseo, electricidad y el agua. Así que sé puntual con el pago de este porcentaje para garantizar el funcionamiento óptimo.
- Mantén en buen estado las áreas externas de tu casa o apartamento: fachada, jardines, estacionamiento, acera, bote de basura.
- Enséñale a tus hijos estas normas con tu ejemplo. Que ellos también cuiden y velen por la limpieza de las zonas recreacionales.
Consejos para relacionarte con tus vecinos
La actitud con la que tratamos a los demás es importante para cultivar buenas relaciones sociales. En un vecindario o edificio la manera en la que se relacionan los residentes determinará en parte el bienestar de la comunidad.
Lo primero que debes saber es que es básico el respeto. Por eso llama a tus vecinos por su nombre: nada de apodos despectivos y muestra respeto por las personas mayores.
Al momento de entablar conversaciones habla en un tono apropiado. No grites, pero tampoco hables entre dientes. Conversa con una entonación pausada, bien articulada, en un volumen audible y sin palabras obscenas. Además, sé modesto y muéstrate humilde y solidario. No sabes cuándo puedas necesitar de ellos.
Principales causas de las disputas entre vecinos
Son varios los orígenes de los problemas en la convivencia vecinal. Entre los malestares más comunes están:
- La morosidad en el pago del condominio o cuota mensual destinada a cubrir los gastos de mantenimiento y servicios.
- Los ruidos excesivos. Televisores y música a alto volumen. Ruidos de remodelaciones.
- El daño a las áreas comunes.
- La insalubridad de algunos propietarios.
- El incumplimiento de las normas del reglamento interno.
- Si se pide una cuota o pago especial para solucionar problemas del edificio. Si algunos se rehúsan a pagar su parte.
- Se pudiera dar el caso de que la seguridad de la comunidad haya sido vulnerada y se proponga tomar medidas al respecto como: reforzar la vigilancia o instalar cámaras de seguridad. Al suponer un gasto adicional, puede haber vecino que se nieguen a esta iniciativa.
Cómo lidiar con los malos vecinos
Ante las principales causas de disputas entre vecinos hay soluciones. Dependiendo del problema hay maneras de arreglar esos inconvenientes.
Cuando la causa de la controversia es la constante morosidad, se pueden llegar a tomar medidas drásticas como una demanda legal. Esta es una decisión que únicamente canalizará la junta de condominio, siempre que esté debidamente registrada. Primero se pueden recurrir a otros métodos como la negociación, para llegar a acuerdos de pago.
Si el problema viene dado por alguna discrepancia entre vecinos, lo mejor que puedes hacer es tomar una actitud conciliadora. No tienes por qué tener siempre la razón, ni mucho menos parcializarte hacia una perspectiva. Detente a meditar en las posibles soluciones y convérsalas con tu vecino.
En caso de que se complique la situación, lo que debes hacer es acudir a los encargados del condominio y ponerlos al tanto del problema. Que sean ellos quienes se encarguen de mediar y solucionar el inconveniente.
Te recomendamos las siguientes acciones para que lidies con los malos vecinos antes de que el problema pase a mayores y se complique.
Intenta resolver los problemas
Es normal que estés molesto luego de ver que tu vecino ha cometido una falta. Espera calmarte para que converses tranquilo con él. No te quedes en la queja. Muchas personas cuando ven estas malas acciones lo único que hacen es comentar la mala acción con todos menos con la persona implicada.
De forma respetuosa y educada explícale que su mal comportamiento dentro de la comunidad está causando inconvenientes en la convivencia vecinal. Es probable que el vecino ya no vuelva a cometer esos actos irrespetuosos.
Si ya es tarde en la noche, y tu vecino todavía tiene la música con alto volumen tócale la puerta con educación para pedirle que le baje. Si no responde a esto. Lo mejor será que los vecinos afectados se unan y acudan a la junta de condominio para discutir las medidas que se aplicarán al respecto.
Sé amistoso
Por lo general los malos vecinos son quejumbrosos, egoístas y no socializan porque creen que todos están en su contra o que no los toman en cuenta. Toma la iniciativa e invítale personalmente a incorporarse en las actividades de la comunidad. Bien sea reuniones, juegos o festejos.
Incentívale a conocer y a unificarse a los demás propietarios del conjunto residencial. Esta es una manera pasiva de hacerle ver que sus actos afectan el bienestar de quienes allí viven. Y posiblemente, puede que controle su mal comportamiento al tomar conciencia de eso.
Reconoce sus virtudes
Si hay algo digno de admirar de tu vecino hazlo saber. Igualmente, si ha mejorado alguna actitud reconócele su buen comportamiento. Agradécele por haber cambiado sus malos hábitos. De seguro esto le motivará a ser mejor cada día al relacionarse.
En caso de que nada de esto funcione, no quedará otra opción que pedir la intervención de la junta directiva o de condominio. Y si fuese el caso, de aplicar acciones legales en su contra.
Esperamos que estas claves para convivir mejor con tus vecinos te funcionen. Si quieres venir a vivir en Santo Domingo, contáctanos para ayudarte a ubicar un inmueble adaptado a tus gustos y necesidades.